Declarada Venerable por Juan Pablo II
Su santidad de vida, muy patente a los que la conocieron, hizo que en 1952 y tras recibir algunas personas gracias especiales por su intercesión, se abre el proceso para la Causa de la Madre María Güell. El 6 de abril de 1998 el Papa Juan Pablo II la proclamó Venerable.
Si bien la obra comenzó con el cuidado de los enfermos tanto en hospitales como en la vela a domicilio, el carisma que legó a sus hijas las Misioneras Hijas del Corazón de María incluye todo tipo de ministerios en los que se practique la caridad con sencillez y humildad:El Carisma del Instituto, heredado de la Madre Fundadora y reconocido por la Iglesia, es el seguimiento de Cristo por el camino de los consejos evangélicos, viviendo el Evangelio en el ejercicio de la caridad con sencillez y humildad a la luz y ejemplo de la Virgen María tan sencilla y humilde de Corazón”.